Posiblemente el primer medio de dibujo a color que se emplea, ya desde la infancia, es el de los lápices de colores, y por lo tanto son conocidas las bonitas y surtidas cajas que los contienen y su inmediato empleo. Sin embargo, cuando hay que profundizar hacia un mundo más artístico, es preciso conocer muchísimas más cosas que las inmediatas si se desea lograr un resultado satisfactorio. Y todas estas técnicas se hallan en las páginas de este cuaderno. Quien utilice los lápices de colores debe conocer sus particularidades: cómo se seleccionan, cómo hacer degradados, cómo se intensifican los tonos o cómo se rebajan, cómo se mezclan para lograr otros colores, entre otras muchas explicaciones que hallará en esta obra.