A los treinta años de dirigir Adonais, Luis Jiménez Martos (Córdoba, 1926) despliega aquí, con detalle de nombres e incidencias, su memoria de una dedicación a través de más de 300 volumenes.
El poeta, Premio Nacional de Literatura, crítico y antólogo, convierte estas páginas en una exposición de su faena que es, asimismo, documento de primer orden donde surgen representantes de diversas hornadas de poetas que se sucedieron durante su empeño como timonel de una colección cuya categoría histórica y creadora resulta indiscutible.
Dos enfoques se fusionan en este volumen; el personal y el poético. La amenidad del estilo evocante, pródigo en anécdotas no faltas de humor, supone uno de los atractivos para interés de los lectores en general y, por descontado, de los especialistas en la materia que tan ágil y sabrosamente aborda.
El autor rinde cuentas de su continuo trabajo y aporta un documento indispensable del fluir, sobre todo joven, de una época.