Los símbolos egipcios —la estrella Sotis y la omnipresencia del río, las pirámides y el dios Sol, las momias y Amón el oculto, etc.— pueblan todavía nuestro imaginario con una curiosa mezcla de mitos y figuras divinas. Si continúan ejerciendo tal fascinación en el mundo racional de Occidente es porque están directamente relacionados con los misterios de la vida y la muerte, lo real y el más allá.
Christiane Desroches Noblecourt es una apasionada de Egipto desde hace más de setenta años. Ha dirigido el departamento egipcio del museo del Louvre y numerosas excavaciones, de modo que conoce mejor que nadie el universo simbólico de aquella civilización. En este descenso por el Nilo invita a descubrir, etapa por etapa, un mundo donde el desierto y el río, los pueblos del sur y los del norte, la piedra y el sol imprimen una coloración especial a los símbolos de esta civilización. Es un viaje apasionante que nos reserva más de un descubrimiento.