Mary Beard, autora de El triunfo romano y una de las mayores autoridades en el estudio de la antigua Roma, nos cuenta una nueva y distinta historia de Pompeya, la ciudad destruida en el año 79 de nuestra era por una erupción del Vesubio. Su libro tiene una doble finalidad. En primer lugar, la de reconstruir lo que fue la vida en Pompeya: los trabajos cotidianos de sus habitantes, el gobierno de la ciudad, los placeres del cuerpo (comida, vino, sexo y baños), las diversiones y los juegos, la religión… Pero también, en segundo lugar, la de combatir los mitos que se han acumulado sobre su historia, comenzando por la dudosa higiene de los baños o el legendario número de burdeles y acabando por la realidad de la catástrofe, de la que nos ofrece una visión muy distinta a la de la leyenda. Mary Beard consigue todo esto en un texto fascinante, que da vida a los más inesperados hallazgos y a lo poco que sabemos de sus habitantes: la sacerdotisa Eumachia; Publio Casca, uno de los asesinos de César; los gladiadores, ídolos de las jovencitas pompeyanas…