¿Por qué una madre piensa que no hay herida, por grave que sea, que no se cure con su propia saliva?¿Por qué un ser que te quiere tanto puede llegar a decir una frase tan cruel como: “Llora, llora, que menos mearás?¿Cómo una madre sabe ver el futuro y si te dice: “bájate de ahí, que te vas a caer”, seguro que te caes?¿Y por qué cuando te caes, en lugar de consolarte te da dos azotes a pesar de que le estás dando la razón?. Este libro es un homenaje a esos seres fascinantes que parece que, en cuanto se convierten en madres, reciben clases secretas para hacer las misteriosas cosas que hacen.