El buen periodismo posee unos objetivos universales y se basa en la adquisición de una amplia gama de aptitudes que permitirán al periodista trabajar en una industria donde las formas de propiedad, la tecnología y la información están sometidas a un cambio continuo. Este manual, que viene a llenar un vacío, pone en tela de juicio las actitudes, los procedimientos y las técnicas tradicionales del periodismo cuando su autor los juzga hipócritas o chapuceros.
David Randall nos enseña que existe una manera, cuando no muchas, de realizar un periodismo veraz y profundo y, de tal suerte, restablecer la fe en una profesión asediada desde fuera por los enemigos de la libertad de expresión y desde dentro por quienes traicionan el buen hacer periodístico, ya sea debido a las presiones estatales, ya a la intromisión de los ambiciosos magnates de los medios de comunicación de Occidente y Oriente.
"Me gusta su gran sentido práctico, su firme adhesión al periodismo veraz y su compromiso con la calidad... El estilo fluido de David Randall y los interesantísimos ejemplos que ofrece hacen que leer este libro sea un placer. Cualquiera que aspire a ser periodista debería estudiarlo... una y otra vez".
Val Williams, Director, Departamento de Prensa, de Thomson Foundation