¿No sé le ha ocurrido nunca, al tomar su ducha matinal, colgar la toalla sobre el espejo con el fin de no tener que verse reflejado/a en él? ¿Qué es lo que le provoca, según usted, esa obsesión por su aspecto y esa constante insatisfacción? La doctora Judith Rodin, fundadora de la Clínica de Trastornos Alimenticios de la Universidad de Yale, cree que esta situación la comparten cada vez más seres humanos y se basa en una especie de adicción al aspecto físico, que a la vez viene avalada por unas cuantas características de la sociedad actual:
- El culto al aspecto exterior como medida del valor social de la persona.
- La creencia de que todos podemos tener la apariencia de un / una modelo.
- El convencimiento de que los defectos corporales reflejan una deficiencia del carácter.
- El hecho de que la acción de comer se considere a la vez como un placer y un pecado.
Pues bien, a partir de ahí, según la autora, es posible salir de todas estas y comprender de verdad, más allá de los tópicos y las modas, lo que significan nuestros cuerpos, tanto social como psicológicamente: una toma de conciencia que ella misma ha pretendido reflejar en este libro, lleno de ideas liberadores, de soluciones eficientes y de nuevas sugerencias para relacionarnos con nosotros mismos tal como somos.