Cuando mma Ramotswe repasa sus cuentas a final de año, descubre que no se está haciendo rica, pero tampoco ha perdido dinero; ha tenido suerte y ha estado muy ocupada; una situación bastante parecida a su idea de la felicidad.
La fama de su agencia de detectives ha llegado a oídos de la embajada de Estados Unidos que la recomienda a una de sus ciudadanas: la señora Curtain, cuyo hijo desapareció en el desierto de Kalahari, hace más de diez años. Michael Curtain trabajaba en la mejora de la agricultura en el árido suelo africano, cuando se esfumó sin dejar rastro. A pesar de las dificultades y del tiempo transcurrido, mma Ramotswe acepta el caso, porque sabe muy bien lo que significa perder a un hijo.
La solidaridad, la complicidad y la comprensión entre Precious Ramotswe y la señora Curtain es muy similar a la que se produce entre su prometido, J.L.B Matekoni, un hombre honrado y cariñoso, y dos niños del orfanato local a los que Matekoni siente el irreflenable deseo de proteger.
Mma Ramotswe, la dueña de la primera agencia femenina de detectives de Botsuana, no sólo tendrá un negocio y un marido, sino una familia completa de quien ocuparse. Al fin y al cabo, en África todos somos "hermanos y hermanas" y ese es el mensaje de esta emocionante novela que ofrece mucho más que la mera solución de un misterio de la mano de un personaje que ha cautivado a millones de lectores en todo el mundo.
«Ocurrentes y tiernas, las páginas de esta novela nos divierten, nos sorprenden y nos llegan al corazón, todo al mismo tiempo.»
Los Angeles Times
«Precious Ramotswe es la Miss Marple de Botsuana.»
Times Literary Supplement