A los dieciséis años Felipe IV era un rey joven instruido en lenguas, artes y ciencia. Su maestro de matemáticas, Juan Lezuza, le enseña que la Tierra se mueve alrededor del Sol, una idea prohibida por la que algunos hombres serían quemados en la hoguera y otros muchos perseguidos. El matemático del rey se convierte así en un hereje mientras descubre el extraordinario secreto por el que la Iglesia se opuso a admitir esa evidencia. Con un ágil ritmo narrativo, Juan Carlos Arce describe las intrigas políticas, la corrupción económica del poder y el importante papel de la diplomacia vaticana en una época marcada por el renacer científico.