Belinda Rodik se basa sobre todo en la vida de los cocineros más creativos y famosos del siglo XVII, Pierre la Varenne y MarcAntoine Careme, para la creación de su protagonista, Nikolaus Pirment, un hombre que en su primera juventud conoció de primera mano las hambrunas provocadas por la Guerra de los Treinta Años y que en esos momentos decidió dedicarse a la gastronomía. La suya es una rápida carrera de ascensos que permite a la autora mostrar la extraordinaria consideración social de los cocineros en la corte, incluso su valor político, y mostrar algunas curiosidades respecto a lo que se comía en esa época. El duro aprendizaje, las rivalidades entre cocineros o las convenciones sociales en las cortes europeas son otros aspectos mostrados mediante una novela de buen ritmo narrativo.
Esta obra añade a la file reproducción de la époco y ambiente, la curiosidad que suponen algunas recetas muy originales reseñadas en la novela.