" La idea de una Europa unida ha ido labrando su surco histórico a lo largo de los siglos con dificultades y contradicciones. Así, tras episodios imperiales, ensayos teocráticos y propuestas hegemonistas, se impondrá, en la segunda mitad del siglo XX, un proceso de integración voluntaria y democrática que ha fructificado en las actuales instituciones europeas. La vieja intuición griega de Europa, más tarde ideal humanista y luego convicción ilustrada, fue tomando cuerpo como conciencia social y política en el siglo XIX; después de 1945, el proceso de unidad es ya imparable. "