Una mañana, mucho antes de que se hubiera despertado el resto del pueblo, Don Quijote de la Mancha decide marcharse. Sobre su fabuloso caballo Rocinante sale con el ánimo de resolver las mismas aventuras que ha leído en sus muchos libros de caballerías, siempre guiado por su gran sentido de la justicia y del valor, aprendido igualmente de sus libros. Frente a él, su fiel escudero y compañero de viaje, el pragmático Sancho Panza. En sus viajes, estos dos hombres irán descubriendo y conociendo a una gran variedad de personajes, lugares y tipos de vida que darán rienda suelta a la imaginación del "caballero" más conocido del mundo.