Querido diario:
Vaya encabezamiento hortera? No pasa nada, que no cunda el pánico. Estar en el paro no es lo peor? ¿no? Es malo, pero no lo peor en absoluto, no. Es más, podría ser peor. Podría verme trabajando por un sueldo de vergüenza haciendo algo para lo que no hacía falta estar cinco vocacionales años en la Facultad? Podría encontrar jefes que no me llegan a la suela de los zapatos y que engolan la voz para decirte «no sirves para esto, bonita». Que no sabes si es peor lo primero o lo segundo... Podría tener amigos cuyo concepto de la amistad es dudoso, y otros tan buenos que dan asco? Podría fijarme en el chico equivocado y él podría ignorarme. Hasta eso podría hacerlo de una manera irresistiblemente atractiva? Podría llegar alguien, calificarme de mileurista con titulitis y quedarse tan ancho y tan simple en su realidad paralela. ¿Mileurista? ¡Para eso debería cobrar algo! Podría dudar hasta de mi color de pelo. De eso mejor no hablamos. Ah, espera, que todo esto es lo que me ha pasado? Insisto, que no cunda el pánico, querido encabezamiento hortera. Sonríe, diviértete.
Así es Diario de una periodista en paro.
NOTA: No se requiere ser periodista para reírse.