Khou-Mi. Ése es el pseudónimo bajo el cual, en 1890, Jules Boissière publica en Hanoi y en una edición de muy poca tirada Diario de un intoxicado. El libro no llega al público occidental hasta 1911, pasada más de una década la muerte del autor. Texto autobiográfico basado en la experiencia de Boissière con el opio, desde sus primeras pipas hasta el momento en que finalmente se aleja de él. Tiene lugar en Vietnam, en las ciudades de Hanoi, Haiphong y Annam, entre los años 1885 y 1889. Boissière considera que la experiencia del opio es fundamental para una comprensión profunda de las culturas del Extremo Oriente. En este sentido, también aprende chino y anamita.
Aparte de un estudio de la cultura del opio ?de «la divinidad del opio», en sus propias palabras?, el libro es también el relato de su experiencia como viajero, teñida de la fascinación del hombre blanco en su contacto colonial con Extremo Oriente. Un breve diario de su acercamiento a esta cultura exótica, tratando de comprenderla y discutiendo el testimonio de otros autores occidentales, así como los clichés asociados tanto al opio como al Lejano Oriente. Basado en una lúcida observación, Diario de un intoxicado es el testimonio de un hombre cultivado, escrito con sobriedad y precisión.