Espejo roto, la novela más extensa y ambiciosa de Mercè Rodoreda, relata la historia de una casa señorial barcelonesa y sus habitantes desde principios del siglo XX hasta los años inmediatamente posteriores a la guerra civil, y es, además, una grandiosa puesta en escena de la desolación y caducidad del ser humano. Insoportablemente cruel en unos pasajes, dolorosamente conmovedora en otros, transfigurada por los fastos del lujo y por las claridades mohosas de la decadencia y la depredación, esta crónica familiar se impone como uno de los títulos mayores de la narrativa hispánica contemporánea.