Cinco poetas y cinco partituras con un campo de interpretación unitario. Esta es la premisa de la que parte Milagros Polo para buscar el sentido único que posee la belleza y la creación. El proceso de la escritura se presenta en esta obra a modo de instrumento que teje una melodía unitaria, aunque con distintas modulaciones, Guillermo Carnero, Antonio Colinas, Pere Gimferrer, Martínez Sarrión y Leopoldo María Penero, todo un mundo poético lleno de figuraciones, espejismos, voces y sueños, que al lector capta en una interpretación hipotética, arriesgada, e imantada por la propia corriente textual que le implica.
Cuarteto y fuga para un espacio desierto es lesctura que profundiza en una "constelación" de cinco poetas, elegidos entre los que aparecieron en torno a 1968. Se busca el "sentido" de cada escritura, entre el contexto de los "depósitos textuales" y las proyecciones espejeantes de este fin-de-siglo. La lectura interpreta lo que el Quinteto poético "interpreta": Variaciones instrumentales de una partitura que sigue construyendo...