Donde empieza el desierto es algo más que una novela, son por lo menos dos y, además, un acercamiento antropológico a la cultura árabe, un apasionante libro de viajes y una brillante reflexión sobre la importancia de lo lúdico en nuestras vidas. De la combinación del diario de un hombre de teatro del siglo XVIII y el relato de un joven antropólogo del XX surge una completa descripción de la cultura árabe, sus usos sociales y sus sistemas de valores, una sugerente teoría sobre la función del juego en la formación de la personalidad y una lúcida reflexión sobre el contraste entre la cultura oriental y la occidental. Una novela que nos ofrece una mirada verdaderamente nueva sobre Oriente Medio.