¿Cómo es posible que África del Norte, poblada por bereberes romanizados y cristianizados en parte, se convierta en pocos siglos, en un conjunto de países completamente musulmanes, hasta el punto de que la mayoría de la población se confiere y se cree de origen árabe? Estas son algunas de las cuestiones que plantea Gabriel Campos, el cual forma parte de lo que él llama "una primavera multiforme de estudios y manifestaciones culturales, amasigh, inseparable de una afirmación cada vez más resuelta de una identidad bereber transnacional".