Andrés Trapiello no es sólo poeta, como cualquiera sabe, pero yo diría que es ante todo poeta. La poesía fue su afán más antiguo, mantenido sin desmayo en todo momento hasta hoy. Se trata, no obstante, de un escritor que ha cultivado con abundancia y acierto todos los géneros. En la totalidad de su obra (¡unos cincuenta libros! en el haber de un escritor que sólo tiene 53 años), la poesía no es ni mucho menos lo que más espacio ocupa. Es la columna menos robusta en apariencia del amplísimo, airoso y acogedor conjunto literario trapiellano, pero es a la postre la más firme y resistente, la más alta y esbelta y aquella de la que en buena medida depende que todo ese prodigioso universo de palabras se mantenga en pie. Eloy Sánchez Rosillo