Sanmao es camino, es búsqueda y es vida, pero sobre todo es libertad. Chen Ping, Echo, Sanmao: tres nombres, tres nacionalidades que ilustran la condición errante de la autora, de quien hizo del camino y los que lo transitan su hogar. Sanmao, caminante infatigable, hace bueno el dicho de que la valía y cuantía del tesoro son siempre ínfimas si se las compara con la aventura que las precedió; por grande que sea el botín, siempre significa lo mismo: la llegada a un final, a un punto de no retorno, a nuestro destino. Sanmao hizo del camino y su vida la más grande de sus obras. Diarios de las Canarias recoge los años que la autora y su marido José Quero, vivieron en las islas y donde su vida dio su giro más dramático. :Rata_ vuelve a traer a nuestro país a una de las voces más enigmáticas y cautivadoras del continente asiático. Por méritos propios, Sanmao debe ser considerada un clásico del siglo XX.