Portugal, año 1809. Las tropas británicas mantienen una posición muy inestable mientras esperan la llegada de Wellington. Por su parte, Sharpe tiene la misión de encontrar a una joven desaparecida. Y, por otro lado, el avance de las fuerzas napoleónicas no se detiene. Oporto ha caído, y Sharpe y sus hombres tienen que abandonar precipitadamente la ciudad. Algo que resulta imposible: quedan varados entre las líneas enemigas, aislados tras el derrumbe del puente sobre el Duero que da acceso a la capital.
Todo cambia cuando el futuro duque de Wellington llega al fin para tomar el mando y decide preparar un contraataque. Entonces, Sharpe deberá decidir si convertirse en cazador en lugar de presa. Y, en medio de los restos de un ejército derrotado, en las colinas de la frontera portuguesa azotadas por una terrible tempestad, el teniente se lanzará a la búsqueda de la joven y, además, de una venganza terrible…