Entre los años 1609 y 1614 se produciría una gran migración desde la Península Ibérica principalmente hacia el norte de África, consecuencia de los edictos de expulsión dictados por los monarcas españoles. Este desplazamiento afectaría a unos trescientos mil moriscos ?descendientes de aquellos andalusíes que la habían poblado durante siglos?, de los cuales unos ochenta mil arribarían a Túnez, donde fueron acogidos por los dirigentes turcos que dominaban esta regencia.
Desde su llegada a Túnez, la comunidad morisca ha constituido uno de los motores de progreso de este territorio, al tiempo que numerosos vestigios, de todo orden, de su anterior vida en el Al Ándalus aún continúan vivos y son tangibles.
Historia de los moriscos de Túnez recoge y describe, a través de un periplo en compañía de los descendientes de esta comunidad por sus principales asentamientos, la herencia y memoria de la cultura andalusí en este país.